Tuesday, July 08, 2014

Carl Ivan Danielsson. Quien fue?


Carl Ivan Danielsson fue Ministro y Embajador de Suecia para España y Portugal, primero de 1921 y 1924, y nuevamente de 1925 – 1937.

Carl Ivan Danielsson en Barcelona.

 
En la ciudad de Barcelona, a las doce y media del día diecisiete de enero de mil novecientos veintinueve.
Reunidos en la oficina de la Exposición el Excmo. Sr. Marques de Foronda, director de la Exposición Internacional de Barcelona de 1929, El Excmo. Sr. Ministro de Suecia en España, Don Ivan Danielsson, y el Comisario General del Gobierno de Suecia en la exposición, Iltre. Sr. Don Albert Winqvist, acompañados de los señores Vocales del Comité Permanente, del Honorable Sr. Cónsul de Suecia en Barcelona, Sr. Don Magnus Nordberk y del Secretario y altos funcionarios del certamen,
Hacen costar que de acuerdo con lo convenido en el contrato celebrado en esta fecha entre la Dirección de la Exposición y el Ilustre Sr. Don Albert Winqvist, el Excmo. Sr. Marques de Foronda pone a disposición del gobierno de Suecia y por durante el tiempo de la Exposición, el terreno cedido gratuitamente para la construcción del Pabellón representativo de aquel país; y en su consecuencia.
El Excmo. Sr. Marques de Foronda, Director de la Exposición, para llevar a efectividad la cesión antes mencionada, se ha trasladado con el Excmo. Sr. Ministro de Suecia, el Comisario General de dicha nación y los demás señores citados, al lugar de la montaña de Montjuïc donde se encuentra la zona destinada a la Sección Internacional y en él da posesión temporal al Excmo. Sr. Ministro de Suecia de la porción de terreno de 3.420 metros cuadrados de superficie, situado dentro del recinto de la exposición y en el lugar en que se indica en el plano adjunto, con objeto de que en dicho terreno construya el Gobierno de Suecia un Pabellón representativo de la nación Sueca en la Exposición Internacional de Barcelona 1929.
El Excmo. Sr. Ministro de Suecia acepta la cesión temporal, o sea durante la celebración del Certamen, del terreno indicado y toma posesión del mismo en representación del Gobierno Sueco, comprometiéndose a construir el pabellón representativo de Suecia, antes de la fecha de la inauguración del certamen, señalada para el 15 de Mayo de 1929.

Y para que conste lo firman por duplicado y a un solo efecto en esta ciudad y fecha su supra.

El Director de la Exposición El ministro de Suecia.

  La firma en aquellos años de este convenio de acuerdo con el protocolo jurídico internacional fue un tratado cultural y comercio de duración determinada, reviste de importancia para el certamen a celebrase en 1929 en Barcelona.
Estos acuerdos en forma simplificada (agreements o notas reversales) son acuerdos internacionales cuyo proceso de conclusión incluye solamente al finalizar el evento, materializándose comúnmente en varios instrumentos. Y por su forma de conclusión, podemos encontrar el tratado o acuerdo, concluido de forma simplificada, firmado por representantes de ambos Países.
Firma de Ministro Embajador SR. Carl Ivan Danielsson en Barcelona 1929 

En la foto del diario oficial de la Exposición de Barcelona se aprecia a Carl Ivan Danielsson justo cuando salía con el rey de España Alfonso XIII de inaugurar el Pabellón de Suecia en 1929. Se aprecia como Carl Ivan Danielsson, a la Izquierda de la comitiva, está varias escalinatas adelante del Rey, tomando una distancia poco usual en estos actos protocolarios o dando cumplida su misión y rompiendo con el protocolo, ya que en estos casos estaría al lado del Rey en plena conversación, acompañándolo a su izquierda como anfitrión. Se ve como el rey esta hablando pero no es propiamente con el Carl Ivan Danielsson. Las infantas llevaban traje negro, guardando el luto por el fallecimiento, a solo tres meses, de su abuela la Reina consorte María Cristina de Habsburgo-Lorena.
 
Carl Ivan Danielsson, como Embajador Ministro de España y Portugal durante los últimos años de la monarquía española, la dictadura de Primo de Rivera y comienzos de la Guerra Civil Española, conocía muy bien el entramado y la turbulencia política y social de la época. Se evidencia en los informes detallados enviados al Rey Gustavo V y al Ministro de Relaciones Exteriores de Suecia.
Cuando Carl Ivan Danielsson llegó por segunda vez a la embajada de Suecia en Madrid le esperaba un informe detallado redactado en Madrid el 6 de noviembre de 1924, en relación a la llamada Exposición de industrias eléctricas en Barcelona a celebrar el 12 de octubre de 1926 al 1 julio de 1927. En el informe se lee, entre otros, que el comité Catalán había sido destituido (miembros y afines a la mancomunidad), los trabajos paralizados y que un nuevo comité trabajaría un nuevo plan para la exposición; tarea que debía ser completada en unos meses, nombrando un nuevo comité ejecutivo. Según el Cónsul de Suecia en Barcelona, probablemente se llevaría a cabo en 1928 o 1929. En los informes detalla pormenores de cómo el General Primo de Rivera, tomó medidas para neutralizar el Nacionalismo Catalán. En uno de sus informes define un suceso con el término lacónico (como en jerga militar), hasta qué punto la dictadura ejercida contra un pueblo trató de destruir su cultura, su identidad. En otras describía hechos lamentables contra la mancomunidad Catalana. Carl Ivan Danielsson define a Primo de Rivera como una persona de laconismo militar «Si gano esta guerra, seréis esclavos para siempre».
En sus informes detalla resumidamente los encuentros y charlas que tuvo con el Rey Alfonso XIII y el General Primo de Rivera; da pormenores y describe situaciones que mas adelante saldrían a la luz pública. España sufría problemas de suma importancia que darían al traste con la monarquía: la falta de una verdadera representatividad política de amplios grupos sociales, la pésima situación de las clases populares, en especial las campesinas; los problemas derivados de la guerra del Rif; y el nacionalismo catalán, censurado y perseguido continuamente por la dictadura.
Esta turbulencia política y social, iniciada con el desastre del 98, impidió que los partidos turnistas lograran implantar una democracia, lo que condujo al establecimiento de la dictadura de Primo de Rivera, aceptada por el monarca Alfonso XIII. Con el fracaso político de ésta, el monarca impulsó una vuelta a la normalidad democrática con intención de regenerar el régimen. No obstante, fue abandonado por toda la clase política, que se sintió traicionada por el apoyo del rey a la dictadura de Primo de Rivera. El rey Alfonso XIII abandonó España voluntariamente tras las elecciones municipales de abril de 1931, que fueron tomadas como un plebiscito entre monarquía o república.

Carl Ivan Danielsson deja Madrid.
Pasados 16 años, y solo 6 de haber dejado su cargo en Madrid, el Ministro Embajador Carl Ivan Danielsson se encontraba en funciones como Ministro Embajador en Hungría y en la embajada de Suecia en Budapest, desde 1942 hasta 1945. En los dos últimos años ya no firmando la cesión de un terreno o tratado cultural o comercial sino firmando salvoconductos, visas para la vida. Se estima que Carl Ivan Danielsson firmó aproximadamente unos 7.000 visas o salvoconductos para judíos en los meses anteriores a la llegada del ejército rojo que liberó de la ocupación Nazi a Budapest. 
 
El Herald Tribune International informó el 4 de marzo de 2013 que los investigadores del Museo Memorial del Holocausto de los Estados Unidos llevan trece años con la tarea de documentar cuántos Judíos Húngaros recibieron estas visas, y calculan que pueden llegar a 10.000.

Cuando llegó la legación sueca a Budapest en julio de 1944, la campaña en contra de los Judíos de Hungría ya había estado en marcha desde hace varios meses. Entre mayo y julio de 1944, Adolf Eichmann y sus asociados habían deportado con éxito más de 400.000 judíos en tren de mercancías. De los deportados, casi 15.000 fueron enviados directamente al campo de concentración de Auschwitz-Birkenau, en el sur de Polonia. En el momento de la llegada de Raoul Wallenberg había sólo 230.000 judíos restantes en Hungría. Junto con el también diplomático sueco Per Anger, quienes publicaron "pasaportes de protección" (alemán: Schutz-Pass), firmados por Carl Ivan Danielsson, que identificaban a los portadores como sujetos suecos en espera de repatriación y por lo tanto impedido su deportación. Aunque estos documentos no eran oficialmente legales (más bien humanitario), en general fueron aceptadas por las autoridades alemanas y húngaras, que a veces también fueron sobornados. 

 
La Legación sueca en Budapest a cargo de El ministro Embajador Carl Ivan Danielsson, también tuvo éxito en la negociación con las autoridades alemanas para que los portadores de los pasaportes de protección fueran tratados como ciudadanos suecos y estar exentos de tener que llevar la insignia amarilla requerida para Judíos.
 
Placa en el sitio de la antigua Embajada de Suecia en Budapest, en honor a
Carl-Ivan Danielsson, Raoul Wallenberg y Per Anger.
 
Historia del Holocausto
Raoul Wallenberg, diplomático sueco asignado a la Embajada de Suecia en Budapest, lideró uno de los más amplios y exitosos esfuerzos de rescate durante el Holocausto.
Rescate en Budapest, 1944-1945
Luego de la ocupación de Hungría el 19 de marzo de 1944, la legación sueca lanzó una operación de rescate para salvar a los judíos de ser deportados a los campos de exterminio. El recientemente creado Directorio para Refugiados de Guerra Americano decidió trabajar con el gobierno sueco con el fin de ayudar a los judíos de Hungría. Muy pronto, la legación sueca en Budapest informaba que se encontraba bajo enorme presión de judíos que solicitaban protección en la forma de pasaportes o visados, y solicitaba el envío de un funcionario especial cuya principal tarea fuera ocuparse de los pasaportes. Se decidió nombrar a Raoul Wallenberg como secretario de la Embajada Sueca en Budapest, con plenos privilegios diplomáticos. Antes de su partida, Wallenberg solicitó que se le otorgara mano libre y la autorización para reunirse con líderes húngaros, y el alto mando Alemán.
Wallenberg nació en 1912 en el seno de una aristocrática familia de banqueros. Estudió arquitectura en los Estados Unidos antes de incorporarse al negocio familiar. A principios de los años 1940s, realizó varios viajes de negocios a los países de la ocupación nazi, incluido Hungría. Ello lo convirtió en testigo de las políticas de la Alemania Nazi.
Wallenberg llegó a la capital húngara el 9 de julio de 1944, con una lista de judíos a quienes ayudaría, y 650 pasaportes protectores para judíos que tuvieran alguna conexión con Suecia.
Imprimiendo pasaportes Suecos.
El primer trabajo de la delegación sueca fue rediseñar el pasaporte de seguridad sueca. Este nuevo primer secretario de la embajada se encontró el documento, que fue legal y que podría ser emitida únicamente por la delegación sueca, físicamente impresionante. Ellos sabían que los nazis y sus homólogos húngaros eran con frecuencia las personas de poca educación, que serían fácilmente impresionados por un documento grande, de aspecto oficial. Cómo corregir esta sencilla evaluación resultó ser!
La primera tarea del equipo sueco fue diseñar un pasaporte de seguridad para ayudar a los judíos en sus relaciones con las autoridades. Los suecos sabían que las burocracias alemanas y húngaras tenían una debilidad por la simbología. Imprimió entonces los pasaportes en azul y amarillo (los colores nacionales de Suecia) con el escudo de las Tres Coronas en el medio (el llamado escudo pequeño) y los completó con el sello del reino de Suecia y firmas del Ministro Embajador Carl Ivan Danielsson. Obviamente los pasaportes de protección no tenían ningún valor según las leyes internacionales, pero imponían respeto tanto a nazis como a sus aliados.
En un comienzo se les concedió un permiso para emitir 1.500 pasaportes. Sin embargo, lograron persuadir a las autoridades húngaras para que le permitieran emitir otros 1.000 y, a través de amenazas vacías al Ministerio de Relaciones Exteriores de Hungría, se logró elevar la cantidad a 4.500 ejemplares. (Llamados Schutzpasses)
Para cumplir con su misión se contó con la ayuda de cientos de personas. Todos eran judíos, pero al trabajar para los suecos estaban exceptuados de lucir la Estrella de David. En agosto de 1944 el jefe de estado húngaro, Horthy, despidió a su primer ministro pro alemán y nombró al General Lakatos para sucederlo. La situación de los judíos mejoró sustancialmente. Debido a la presión diplomática, orquestada y ampliada por Raoul Wallenberg, Adolf Eichmann, ya no podía “resolver el tema húngaro” tal como lo había planeado.
Casas de Seguridad
Con las finanzas del Departamento de Defensa de los Estados Unidos, Wallenberg comenzó alquilar propiedades. Se alquiló 32 edificios alrededor de Budapest y los declaró extra-territoriales, protegidos por la inmunidad diplomática de Suecia. Una vez más, sabía que los nazis eran demasiadamente impresionados por los emblemas oficiales del gobierno. Así que él puso signos intrincadamente diseñados que se veían oficiales sobre los edificios, tales como "La Biblioteca Sueca" y "El Instituto Sueco de Investigación". Él colgó enormes banderas suecas en los frentes de los edificios y puso brillantes escudos gubernamentales en las puertas
Aparentemente 32 "bibliotecas" suecas no eran sospechosas mientras tenían los bienes diseñados signos “oficiales” en las entradas. Los nazis nunca descubrieron el complot. Cuando los soldados nazis irrumpieron en las casas buscando a los judíos, la palabra viajó rápidamente por la vid judía de secretos de que todas las nuevas "bibliotecas" suecas en la ciudad eran en realidad casas de seguridad.
Los llamados edificios de Wallenberg dieron refugio a más de 10.000 personas. Algunos testigos dicen que en realidad tres veces más que esa cantidad se escondieron en las casas de seguridad. Otras misiones diplomáticas neutrales en Budapest comenzaron a seguir el ejemplo de los suecos de expedir Schutzpasses y varios diplomáticos de otros países fueron inspirados a abrir sus propias casas de seguridad para los refugiados.
En agosto de 1944 Per Anger viajó a Estocolmo para pedir aún más refuerzos para la legación. Las nuevas personas llegaron a ser el agregado de Lars Berg administrador Goté Carlsson, y el sueco representativa "Save The Children" Asta Nilsson. El Cónsul Yngve Ekmark también estaba ligado a la legación y el almacenamiento y distribución de alimentos, medicinas y ropa para la operación de rescate organizado.


Marchas de muerte
Mientras tanto Adolf Eichmann comenzó sus brutales marchas de muerte, los nazis realizaron su programa de deportación prometida al forzar a grandes contingentes de judíos a abandonar Hungría a pie. La primera marcha comenzó el 20 de noviembre de 1944, y las condiciones a lo largo de los 200 km (120 millas) de la ruta entre Budapest y la frontera con Austria fue tan terrible que hasta los mismos nazis protestaron.
Miles de judíos marcharon en columnas interminables, con hambre, con frío y en gran sufrimiento. Miles murieron en el camino. Fue durante estas marchas que las acciones de los suecos se hicieron legendarias. Raoul Wallenberg, Per Anger, permanecieron con ellos continuamente distribuyendo Schutzpasses, alimentos y medicinas. Alternativamente amenazaron y sobornaron a los nazis hasta que logró asegurar la liberación de los que habían sido dados sus Schutzpasses. Se logró rescatar a unos 17.000 judíos que estuvieron en las marchas.
Oficialmente ante las autoridades Húngaras se había impreso 7.000 Schutzpasses, pero con toda certeza fueron miles los salvoconductos que se imprimieron y firmaron “pases de lucha por la Vida” 


 
Los trenes de Auschwitz
Los suecos intensificaron sus acciones de rescate cuando Aldof Eichmann nuevamente comenzó a enviar a los judíos húngaros en trenes de carga. Cuando los vagones de carga llenos de judíos se paraban en las estaciones, en varias ocasiones Wallenberg subía hasta la parte superior de los vagones y corría por los techos y entregaba pasaportes de protección a sus ocupantes. En una ocasión los soldados alemanes recibieron la orden de dispararle, pero estaban tan impresionados por la valentía de Wallenberg que ellos deliberadamente apuntaron demasiado alto para fallar. Él entonces fue capaz de saltar hacia abajo y exigir que se le permitiera salir del tren a los judíos que habían recibido sus Schutzpasses para que regresaran a la ciudad con él.
 
DOCUMENTOS época del Holocausto SALVAMENTO FIRMADOS POR CARL IVAN DANIELSSON, con sello.
DANIELSSON, Carl Ivan. Schutz-Pass (Certificado de Protección). Budapest. Embajada de Suecia, 17 de agosto 1944. Una sola hoja de papel, se desarrolló la medición de 8-1/2 por 13-1/2 pulgadas.
Original Certificado de Protección emitido a un joven judío húngaro, firmado por Carl Ivan Danielsson, con el documento de protección firmado con el sello proclamando al portador a ser un ciudadano de Suecia, y por lo tanto exentos de llevar una estrella proclamando que él es judío.
Este modesto pasaporte y documento era en realidad, certificados a la vida de valor incalculable, la concesión de escapar de una muerte segura por lo demás a la familia para la que fueron creados, y se les pagaba por un alto precio con la vida de los grandes humanistas del siglo 20. El Schutz-Pass está firmado por Carl Ivan Danielsson, el jefe de la Misión de Suecia en Budapest (que actuaba en nombre de siete países) y quién fue responsable por el rescate y la protección de decenas de miles de Judíos de Hungría, junto a Wallenberg. La delegación de Danielsson fue una de las primeras en enviar informes y dibujos de los campos de Hungría y, sin duda, encabezó uno de los esfuerzos más organizados para salvar judíos de cualquier lugar de Europa. Acompañando a la Schutz-Pass, un documento de la embajada del rey de Suecia en Budapest (Königlich Schwedische Gesandtschaft Budapest).

Un Ángel de la Misericordia: Para el Pueblo Judío, dio su vida por la dignidad humana.
El 9 de julio de 1944, Raoul Wallenberg, de 31 años, llegó a la embajada sueca en Budapest. Viajó a la ligera con una mochila y una pequeña pistola. Su principal adversario fue el teniente coronel SS Adolf Eichmann. En el momento en que llegara Wallenberg en Hungría, todos los 437.000 Judíos - hombres, mujeres y niños - que vivían fuera de Budapest ya habían sido deportados. El resto de la comunidad judía de Hungría constaba de los 230.000 judíos que vivían en la capital.
En 1944 los Estados Unidos habían establecido el Consejo de Refugiados de Guerra (WRB según las siglas en inglés), una organización cuyo objetivo era rescatar judíos de la persecución nazi. El CRG pronto descubrió que los suecos estaban trabando seriamente. El representante del CRG convocó a un grupo prominente de judíos suecos para elegir la persona que viajaría a Budapest a iniciar la acción de rescate. Entre los participantes estaba el socio comercial de Raoul Wallenberg, Koloman Lauer, quién se desempeño ante el grupo como experto en Hungría.
La primera elección del grupo fue Folke Bernadotte, vocero de la Cruz Roja sueca y pariente del Rey sueco Gustav V. Cuando presentaron a Bernadotte, su misión no fue aprobada por el gobierno húngaro, Koloman Lauer sugirió que se pusieran en contacto con Raoul Wallenberg, su propio colega comercial. Lauer destacó en particular el hecho de que Wallenberg ya había viajado muchas veces a Hungría mientras trabajaba para la empresa que ambos poseían. Algunos miembros del grupo dijeron que Raoul era demasiado joven y parecía no tener experiencia, pero Lauer insistió. Raoul era el hombre indicado, decía; listo, enérgico, valiente y tenaz. Además, su apellido era muy conocido.
Wallenberg aceptó la oferta y a finales de 1944 había sido designado Primer Secretario de la misión diplomática sueca en Budapest. Raoul estaba muy ansioso por viajar a Budapest pero primero escribió una carta al Ministerio de Relaciones exteriores de Suecia. No estaba dispuesto a tolerar que el protocolo diplomático y la burocracia pusieran trabas a su misión.
Solicitó autoridad plena para tratar con quién quisiese; aún sin necesidad de informar de antemano al jefe de la Legación. También solicitó se le permitiese utilizar el servicio de correo diplomático por fuera de los canales normales. Su pedido era tan inusual que el asunto llegó hasta el Primer Ministro Per Albin Hansson, quien consultó con el Rey Gustav V antes de informarle a Wallenberg que se habían aceptado sus condiciones.
Las acciones de rescate de Wallenberg
El tiempo corría en su contra. Cuando Raoul Wallenberg llegó a Budapest en julio de 1944, Adolf Eichmann -personalmente a cargo de la solución final en Hungría- ya había ordenado deportar a más de 400.000 judíos, hombres, mujeres y niños. Entre el 14 de mayo y el 8 de julio habían sido evacuados en 148 trenes de carga. Cuando Wallenberg llegó a Budapest, sólo quedaban 200.000 judíos en la capital.
Eichmann preparaba un plan para limpiar a toda la población judía de Budapest en un período de 24 horas. En un informe a Berlín, había escrito que “los detalles técnicos tomarían unos días.”
Si se hubiese llevado a cabo dicho plan, el viaje de Raoul Wallenberg hubiese sido en vano. Pero el Jefe de Estado, Miklós Horthy, recibió una carta del Rey Gustav V de Suecia que llamaba a detener las deportaciones de judíos. Horthy tuvo que recurrir a su coraje. Le envió una nota al Rey Gustav V diciéndole que había hecho todo lo que se encontraba a su alcance para garantizar el respeto por los principios de humanidad y justicia. Se cancelaron las deportaciones alemanas. En la frontera se detuvo un tren que transportaba a 1.600 judíos y se lo envió de vuelta a Budapest.
Sorprendentemente, los alemanes aprobaron la detención de las deportaciones. La razón podría ser que durante ese período uno de los máximos líderes nazis, Heinrich Himmler, estaba comprometido en un juego muy arriesgado. Alemania perdía la guerra y Himmler creía que podría negociar una paz por separado con los aliados Occidentales. Quizás, su anhelo era mejorar su posición de negociación reduciendo la presión sobre los judíos. Mientras tanto, en Hungría, Adolf Eichmann esperaba una nueva oportunidad.
El jefe de la Legación sueca en Budapest en ese momento era el ministro Carl Ivan Danielsson. Su segundo era el Secretario Per Anger, y Raoul Wallenberg como primer secretario se convirtió en el líder de un departamento especial que estaba a cargo de defender a los judíos. Incluso antes de que llegara Wallenberg, Valdemar Langlet, líder de la Cruz Roja húngara, estaba colaborando con la Legación sueca. Langlet alquiló edificios a nombre de la Cruza Roja y puso carteles tales como “Biblioteca sueca” e “Instituto de Investigación sueca” en las puertas. Estos edificios eran utilizados como escondites para judíos. Wallenberg no recurrió a los usos y costumbres de la diplomacia internacional. Sorprendió a sus colegas suecos con métodos poco convencionales. Utilizó desde sobornos hasta amenazas. Cuando sus pares diplomáticos comprobaron el éxito de las gestiones de Wallenberg, se unieron a él con ahínco y dedicación.

Lo que los hombres pueden hacer
Desafiando toda la maquinaria de Alemania y sus aliados húngaros, empleando su imaginación como un arma ofensiva, Danielsson, Anger, y Wallenberg decidieron hacer lo imposible. Con la ayuda de ciertas personas, y algunos de ellos siendo diplomáticos de buena voluntad, demostraron que la valentía humana no tiene límites. A través de un proceso de persuasión, amenazas y una inigualable dosis de creatividad diplomática, estos suecos lograron salvar las vidas de múltiples de decenas de miles de judíos húngaros. A través de todos aquellos a quienes el salvó, su heroísmo fue coronado por la tragedia.

Hechos de una Agenda en la Ciudad de Estocolmo 2013-09-18.
Informe de Prensa del Ayuntamiento de Estocolmo:
La comuna de Estocolmo (Ayuntamiento) en el 2013-09-18.
Ayer por la tarde la vice-alcalde Sra. Madeleine Sjöstedt (FP), regidora de Cultura de la ciudad de Estocolmo, dio a conocer el cartel durante una ceremonia junto con la hermana de Raoul Wallenberg, Nina Lagergren y Olle Wästberg. El cartel memorial ubicado en la esquina Odengatan, Bragevägen en Estocolmo, indica la última residencia que Raoul Wallenberg tubo en 1944 antes de viajar a Hungría

En la placa de la memoria se puede leer:
"Desde su residencia en esta casa Raoul Wallenberg (1912 - el año de la muerte desconocida) en julio de 1944 salía hacia Budapest. Su misión era rescatar Judíos húngaros de la maquinaria de exterminio nazi. Gracias a su coraje y el ingenio rescataron a miles de personas. Raoul Wallenberg fue arrestado, llevado a Moscú, y murió en cautiverio soviético, se desconoce el año en que murió.

"Una y otra vez, fueron lentos para" matar gente, caballos, árboles caídos y casas destrozadas. “Per Anger trató de persuadir a Raoul Wallenberg para quedarse con el resto de los suecos en la parte de Buda, pero Raoul se negó. Iba de regreso a Pest. Dijo que no quería oír después de que no había hecho todo lo posible. "
Del libro de Ingrid Carlberg Hay una habitación aquí y esperando por ti... - La historia de Raoul Wallenberg (2012)
 
Nota: Carl Ivan Danielsson nació en El Havre, Francia, en 1880. Después de la Guerra Mundial se retiró. Falleció a sus 83 años en su casa en Italia, en 1963. En internet se encuentran miles de testimonios, en muchos países, ciudades, inauguran fundaciones de diversos índole educativos o museos, y en donde se han levantado testimonios para honrar la labor de estos Humanistas. 

Coordinador de la petición ciudadana desde 2005 ¨Reconstrucción de la Torre en Montjuïc. Patrimonio Barcelonés¨